Por Tania Montesinos, alumna de 2ºB
Manuel Montesinos tiene ahora 69 años. Gran parte de su vida la ha dedicado en la magia de las bibliotecas y, por ello, conoce todos sus secretos. En este artículo hablaré sobre lo que hay detrás de las apariencias de estos sitios, y veréis que no es todo como pensamos, sino que hay más. Esto lo haré entrevistando al propio Manuel Montesinos, mi abuelo.
-Hola Manuel, te entrevista tu nieta Tania. Me gustaría que me hablaras sobre tu antiguo trabajo, en la Biblioteca Pública del Estado llamada Biblioteca «Manuel Alvar» en el año 2003 en honor al famoso filólogo.
–¡Fantástico! Tengo muchas ganas de mostrar las maravillas que tienen acumuladas estas estanterías.
–¡Me alegro! Pues empecemos. Primera pregunta: ¿Durante cuánto tiempo estuviste trabajando en «Manuel Alvar»?
-Estuve trabajando desde el año 1992 hasta el año 2019, por lo tanto estuve trabajando 27 años.
–¿Me podrías decir algo a destacar de este grande hogar para los libros y lectores?
-Es una biblioteca especial por sus recursos y sus fondos (alberga más de 600.000 documentos). Entre sus fondos, en el Depósito, cuenta con libros valiosos y antiguos, aunque ninguno incunable (recordemos que llamamos incunable al libro de la primera impresión tras la aparición de la imprenta, hacia mediados del 140, es decir, libros impresos antes de 1.500). La Biblioteca cuenta con fondos desde el 1.800 a la actualidad, muchos con un gran valor, raros o ediciones únicas. También cuenta entre sus fondos con libros prohibidos por la censura de la época de la dictadura, en el siglo pasado.
–¿Por qué cerraron la biblioteca?
-La biblioteca fue cerrada, desgraciadamente, hace ya 7 años por problemas en las cubiertas como, por ejemplo, filtraciones en el tejado y problemas de ventilación. Es una pena que este cerrada por problemas del mal entendimiento entre el Ministerio de Cultura (que es el dueño del edificio) y la Comunidad de Madrid (que es la responsable de el personal).
–Normalmente, ¿había niños por allí?
-Si, teníamos 5 plantas y la primera era destinada a una biblioteca infantil, muy bien equipada donde se hacían en los fines de semana cuenta cuentos y teatro. Era visitada por muchos niños pequeños, incluso casi bebes y se sentían muy felices al recibir su carné de lector. Nunca se veía vacía y por las mañanas venían colegios de visita.
-¿Qué ha pasado con la biblioteca una vez cerrada?
-Esta siendo reparada, y aunque el proceso este siendo lento, próximamente la volverán a abrir.
–¿Me podrías hablar sobre tu experiencia trabajando en un sitio tan asombroso?
-Lo que más me gustó fue el ambiente con los lectores. Teníamos una actividad, que a mi personalmente me gustaba mucho, que se titulaba los lectores recomiendan y eran opiniones y recomendaciones de los lectores con sus libros preferidos.
-¿Podrías hablarme de los espacios coworking?
-Nosotros empezamos a ponernos en marcha pero no dio tiempo a desarrollarlos debido a los problemas de las obras (por lo que se cerró la biblioteca). Son espacios donde puedes hablar y compartir tu experiencia lectora. Me parecen unos espacios interesantes porque animan a la gente a compartir sus lecturas y experiencias.
Ejemplo de espacio coworking
-Bueno, pues hasta aquí llegaría la entrevista de hoy. Gracias por colaborar y mostrarle al mundo lo mágicos que son estos lugares, ¡hasta luego!
Foto de Manuel trabajando en la biblioteca.
Sistemas de archivos bibliotecarios en estanterías modulares desplazables sobre raíles.